martes, 12 de febrero de 2008

ANSICHTEN EINES CLOWNS, HEINRICH BÖLL, INFIERNO Y OBISPOS CONTRA ZP

Portada del libro Opiniones de un payaso de Heinrich Böll. Editorial dtv (www.dtv.de)

"Ich bin in Bonn geboren und kenne hier viele Leute: Verwandte Bekannte. ehemalige Mitschüler. Meine Eltern wohnen hier, und mein Bruder Leo, der unter Züpfners Patenschaft konvertiert ist, studiert hier katholische Theologie.(...)Seit dem Tod meine Schwester Henriette existieren meine Eltern für mich nicht mehr als solche. Henriette ist schon siebzehn Jahre tot. Sie war sechzehn, als der Krieg zu Ende ging, ein schönes Mädchen, blond, die beste Tennisspielerin zwischen Bonn und Remagen"(1)

Así empieza Henrich Böll, el cuarto capítulo de su libro Ansichten eines Clowns: Opiniones de una payaso , el cual -por un acto reflexivo- me he puesto a releer, tras las declaraciones del papa Benedicto XVI certificando hace unos días que el infierno existe y a raíz, también, que en España, en plena precampaña electoral, la iglesia, abiertamente, ha pedido al electorado a votar en contra del actual jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, empedernido, confeso y convito lector de Borges .

No sé si Böll, premio Nobel de Literatuta 1972, proceda de una familia católica, pero quien escribe, sí -en Alemania, por cosas del destino, convertido al protestantismo- como para variar. Heinrich Böll dijo una vez que su libro no era anticatólico, porque después de publicado Ansichten eines Clowns, le llovieron las críticas.

En la novela se lee los constantes pesares que vive Hans Schnier con su novia, una ferviente seguidora de los postulados de la iglesia católica. Hans tiene una relación con ella que dura años. Relación que apunta al matrimonio. Pero antes de ello, ambos discuten sobre la manera de cómo educarán a sus futuros hijos y cómo vivirán. Esa forma terca de su pareja, atada por todos lados a su educación religiosa, inquieta abiertamente a Hans. Un día, Marie le deja una esquela de despedida.

Hans, quien está decidido a no seguir los deberes impuestos por una sociedad alemana embriagada en el laberinto del milagro económico de la década del cincuenta y sesenta, y marcado por la sombra de la guerra y la participación activa de sus padres en el movimiento nazi, empieza a saldar cuentas con el pasado. Para hacer la cosa más breve, cuento que nuestro personaje se convierte en un payaso, en un cantante de la calle guitarra en mano. Cambia su vida totalmente.

La trama de la película americana Into the Wild (2) de Sean Penn, que vi el mes pasado, posee tintes parecidos a esta historia, salvando las épocas y otras versiones, por supuesto, porque Christopher McCandless no es de ninguna manera Hans Schnier, empero, esconden el mismo afan de echar por tierra los parámetros que a veces la familia y sociedad impone a muchos.

McCandless existió, y Heinrich Böll fue obligado a servir a las tropas hitlerianas.

En fin, nuestro payaso cantador termina su historia en una estación de trenes pidiendo limosna y tarareando "der arme Papst Johannes hört nicht die CDU, er ist nicht Müllers Esel, er will nicht Müllers Kuh" (3)

A propósito de la existencia del infierno, idea que defendiera el teólogo suizo Urs Von Baltasar, me gustaría saber si alguien ha leído el libro de Fernando Vallejo titulado La puta de Babilonia.
(1) Ansichten eines Clowns. Heinrich Böll. Insel Verlag. Leipzig.1990. Página 24.
(3)Ibid. Página 285.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

paja que siga creciendo, pero

" La decisión de cuáles de los cuentos recibidos serán publicados en Quipu será tomada por un grupo de evaluadores, de preferencia elegidos entre los administradores de los blogs participantes."

sin embargo la dirección/filtro es tu correo electrónico, gustavo
gfaveron@gmail.com

en aras de la transparencia, ¿no sería mejor que se creara una cuenta de correo independiente accesible por el jurado? así no cabría ninguna sospecha de que tú, administrador del correo buzón, filtras algún trabajo incómodo o a alguno de tus múltiples seres odiados.

feliz día de la amistad.

Anónimo dijo...

Mi estimado, se agradece el interés que aportas en el proyecto Quipu.Sobre tu comentario transcribo lo que le escribí a Jose Alejandro: "Jose Alejandro, gracias por la iniciativa, y tu preocupación. Como el asunto es un trabajo en equipo, partimos de la confianza mutua. El proyecto está creciendo porque se van sumando más opciones. Y esas son buenas noticias ligadas a su permanente transparencia. ¿Te has puesto en contacto con los demás miembros?"
Un saludo. José Carlos.
Y perdona que salga este correo sin nombre de usuario.