miércoles, 30 de septiembre de 2009

LA FERIA DEL LIBRO DE FRANKFURT 2009 A PUNTO DE COMENZAR




China es la invitada de honor de la Feria de Frankfurt 2009. En 2010 será Argentina. Fuente fotográfica: Frankfurter Buchmesse.
La Feria del Libro de Frankfurt 2009 abrirá sus puertas el próximo 14 de octubre. En esta oportunidad China es la invitada de honor. En 2010 será Argentina. La flor y nata del mundo editorial se apersonará a la ciudad que vio nacer a Johann Wolfgang Goethe. Como cada año, Frankfurt se transformará en el epicentro del negocio mundial del libro. En esta ocasión, tambien, la cara futurista del medio editorial tomará las instalaciones de la feria y los libros digitales y todo lo referente al mundo futurista de los libros provocarán la curiosidad de los asistentes al evento.

A continuación les presentamos algunos de los eventos que tienen relación con América Latina y España y que se realizarán en el marco de la Feria Internacional del Libro de Frankfurt:

14.10.2009 a las 20 horas. Lugar: Instituto Cervantes de Frankfurt

Exposición "Borges-Der Atlas". 130 fotos y textos de Borges. La apertura de la exposición será el día 14 de octubre de 2009 en los ambientes del Insituto Cervantes de Frankfurt. En la misma acudirá la viuda de Jorge Luis Borges, María Kodama. "Borges-Der Atlas" estará abierta al público desde el 14.10.2009 al 30.01.2010

14.10.2009 a las 14 horas. Lugar. Recinto de la Feria de Frankfurt 4.1 D 122

Lectura del libro "Kultromane der kanarischen Inseln" con el autor Martín Sabas, organizado por la editorial konkursbuch Verlag Claudia Gehrke

15.10.2009 de 12:30 - 13:30 y de 13:30 - 14:30. Recinto de la Feria de Frankfurt 5.0 D901
Lectura y discusión "Literarische Begegnung: Argentinien" con los autores José Pablo Feinmann y Osvaldo Quiroga.

15.10.2009 de 16:15 - 17:15. Recinto de la Feria de Frankfurt 6.1 E913
Discusión "La Hora Latina", diálogo sobre Argentina, la invitada de honor de 2010 en la Feria Internacional del Libro de Frankfurt, con Guillermo Martínez, Daniel Divinsky y Silvia Hopenhayn.

18.10.2009 de 14:00 - 15:00. Recinto de la Feria de Frankfurt 3.0 J341

Lectura y discusión sobre literatura de libros infantiles Bajo el arbol de las letras. "Una golondrina tijereta cuenta historias" con el autor Daniel Cruz, organizado por la editorial Planet Alice Productions.
Más:

martes, 29 de septiembre de 2009

LA LUZ Y LA OSCURIDAD DE JOSE ANTONIO MUÑOZ ROJAS


"El otoño avanza su velo sobre el campo germano. Las hojas caen silentes en medio de mis manos"(1) .
En la foto, hojas de un árbol en Baden Baden, Alemania. Foto del domingo 27 de setiembre de 2009. Baden Baden, Alemania 2009. Foto: M.S.

La leyenda dice que cuando un poeta muere una estrella se vuelve más brillante. Ha muerto el poeta José Antonio Muñoz Rojas. Nacido en una de las ciudades andaluzas por donde he paseado mis huesos húmeros, parafraseando "huachafamente" al gran poeta César Vallejo: Antequera. Seguro que el poeta Muñoz Rojas conocia intensamente la fuerza telúrica de los versos del poeta más universal de América.
Antequera es una hermosa ciudad abierta como una mano sobre el ombligo de Andalucía, desde lo alto de esa ciudad se puede contemplar el paisaje que la circunda: olivares bailando entre los vientos y campos lamiendo la piel de los caminantes. Por ese rincón de España anduve con mi rocinante invisible cargando una mochila con poemas de Lorca. Dicen que Muñoz Rojas amaba los poemas de Juan Antonio Machado.
Ahora que con el dolor en el corazón ha desaparecido este poeta, dicen que hay más estrellas en el cielo que alumbran como relámpagos, mientras que a los de a pie, el otoño les acerca su hocico de hoja aurífera.

Buenas noches José Antonio y descansa en paz.
Va por la poesía un poema de usted, de uno de sus poemarios más bellos que escribió: "Oscuridad adentro".

ME DICEN QUE OS DIGA…

Soy un poeta que tiene
la voz temblorosa, y no sabe
qué clase de luz se le viene a las manos,
y cómo disponerla, y decirles
a los demás la clase de luz
que se le viene de pronto, sin saberlo, a las manos.

No sabría deciros, si alguien
no estuviera por dentro diciendo:
“Di ahora: La luz tenía esta forma,
y una vez comenzado sigue siempre”.

No sé muy bien qué luz sea esta;
no sabría deciros de la voz.
Soy un poeta a quien se le dice.
Escucho. Os hablo. Acaso me entendáis.

De esto que digo apenas sé la forma.
Siento una resonancia, pego el oído.
Se viene la palabra como un agua.
“Diles esto. No digas otra cosa”.

No es triste ni alegre. No es triste
ni alegre un poco de ceniza.
Es un poco de ceniza. Si lo vemos,
decimos: Es sólo un poco de ceniza.

Claro que no digo lo que tengo pensado,
porque tampoco lo sé muy bien. Me dicen
que os diga. Nunca dicen:
“Diles algo que entiendan”. Simplemente:
“Diles”, y a veces solamente
es como un poco de ceniza.

Como una chispa de luz que la ceniza
llena olvidada, y otras veces
es un derramarse de algo como la tristeza
o la alegría.
No me hagáis responsable.
Más vale que paséis sin parar.
Uno es un poeta que ve de pronto una rendija
abierta a una luz indudable.

(del libro "Oscuridad adentro" del poeta José Antonio Muñoz Rojas)


(1) versos de literatambo.

sábado, 26 de septiembre de 2009

"LEIPZIGER KÖPFE": LIBRO PARA ADMIRAR A LOS PERSONAJES DE LEIPZIG






Arriba, portada del libro "Leipziger Köpfe" de la editorial Leipziger Medien Service GmbH; y una vista de una calle en Liepzig, Alemania, en el verano 2009. A la derecha, donde está el parasol rojo se expenden para los viandantes unas ricas salchichas que te dan fuerzas para seguir admirando las calles de esta bella ciudad. Foto: literatambo 2009.
Posee la segunda universidad más antigua de Alemania, y, en su seno lleva una gran tradición ferial, por lo que se le reconoce como poseedor de las ferias más antiguas de Europa (1190); además de ser el centro histórico de la imprenta de Alemania, en su perimétro se respira un pasado altisonante en donde Juan Sebastian Bach y Felix Mendelssohn compusieran grandes partituras o Johann Wolfgang von Goethe y Hans Fallada (Rudolf Ditzen) sintieran el impulso de escribir poemas y relatos. La ciudad se llama Leipzig, y para un viajero como yo (¡ojo! no turista) esta ciudad te hace sentir a cada paso -recorriendo sus calles, campos, avenidas, o, bebiendo un vino o una cerveza al lado de gente tan cordial y bonachona- el gran pasado que la cobija.

Desde Leipzig me ha llegado hoy el libro "Leipziger Köpfe. Hundert Berühmtheiten auf der Spur" (Cabezas de Lepzig: Tras la huella de cien famosos). Editorial Leipziger Medien Service GmbH. Leipzig. Marzo 2009. El libro, de 111 páginas, es un hermoso compendio de las más famosas personalidades que nacieron, vivieron y trabajaron en Leipzig. Existen tantos nombres, de los cuales algunos ya tenía memoria.

El libro, que aborda a cada personaje en una página, es un rico resumen sobre gente como Goethe, Friedrich Schiller, Johann Sebastian Bach (1), Richard Wagner (2), Christian Thomasius, el hombre que se opuso a los procesos contra las mujeres culpadas de brujas a finales del siglo XVII y reconocido como fundador del periodismo germano; Georg Philipp Telemann, el componista de música más prolífico de su tiempo con más de 800 obras, aunque otros musicólogos señalan que son más de 3000, como "Der Tod Jesu" o "Wassermusik" (3).

Los personajes en el libro llueven a cántaros, entre modernos y pasados, entre los que podemos destacar a Robert Schumann, el gran compositor de la época del romanticismo de la primera mitad del siglo XIX, que nos ha dejado para la postridad composiciones como "Opus 2 Papillons" (4); Edvard Grieg, el compositor noruego que estudió en Leipzig y que luego nos regalara tantas melodías que suenan cada día mejor: escuchen "En la gruta del rey de la montaña (5); u otros personajes que no tienen nada que ver con la música sino con esa leyenda que ha hecho de Leipzig el corazón histórico de la imprenta, como Philipp Reclam, el editor que advirtió a comienzos de la mitad del siglo XIX que la cultura, en ese entonces, era para las élites, así que se puso manos a la obra para que los libros llegaran a toda la gente; Friedrich Nietzsche, Erich Kästner, Friedrich Arnold Brockhaus, el hombre de las enciclopedias, cuyo recuerdo me lleva a contemplar los libros levantados como pirámides en las casas de grandes amigos de la tierra de Albert Einstein.

"Leipziger Köpfe. Hundert Berühmtheiten auf der Spur" es una declaración de amor a la ciudad de Leipzig, a su gente y su pasado.


En la foto de arriba, la Plaza del Mercado de Leipzig, tan igual como lucía hace centenarios. Por aquí caminó Goethe, Mendelssohn, Bach, Schiller, Nietzsche, y tantas personas desconocidas, como este niño en la foto de abajo, ensimismado, en sus apenas dos años, con la notas musicales de Grieg o Vivaldi que toca este grupo callejero, que instrumentó, una tarde de julio de 2009, el más grande concierto de cámara que se haya llevado a efecto para transeunte alguno. En Leipzig se respira música por todos sus costados. Foto: literatambo.




Bueno, no solo se respira música en Leipzig, también literatura (6). Este rincón, que es visitado por miles de turitas, ha petrificado en metal los personajes del libro de Goethe "Fausto". Al respecto hay una leyenda, pero se los contaré en otra oportunidad. Solo les diré que Goethe pasó uno hermoso tiempo en Leipzig, adonde vino a estudiar derecho, luego de haber conocido a su amor juvenil en Alsacia (7). En la foto inferior se puede observar un impresionante mural que se halla en la avenida que lleva a uno de los barrios más encantadores de Leipzig: Connewitz.



Hace 20 años, Leipzig (8) fue el corazón del movimiento pacífico que manifestó su incomodidad al regimen de la ex República Democrática Alemana. Estas calles, hace 20 años, se llenaron de gente para cerrar heridas y abrir nuevas alamedas. Entonces se unieron las dos "alemanias" y cayó el muro de Berlín. Desde esta ciudad, donde Napoleón recibió uno de los castigos más fuertes en la Batalla de las Naciones, fluyeron los ríos y nació la emoción. En la foto un afiche que invita a diversos eventos en conmemoración a ese movimiento pacífico de 1889.


(1) http://www.youtube.com/watch?v=xrIYT-MrVaI&feature=related



lunes, 21 de septiembre de 2009

DE LOS BASTARDOS DE QUENTIN TARANTINO, AL ANTICRISTO DE LARS VON TRIER Y EL TOKIO DE ISABEL COIXET





Afiches de las tres películas que he visto en salas de España y Alemania. También vemos la portada del libro "Mapa de sonidos de Tokio", de Isabel Coixet.









La imagen de un oficial nazi bebiendo leche mientras interroga a un campesino francés para conocer el paradero de una familia judía, es una de las partes de „Malditos bastardos“ de Quentin Tarantino que más impresiona al principio de la película; la otra, es al final, cuando se ve el rostro agujereado a tiros de Adolf Hitler, mientras rebotan las balas por los cuatro costados del teatro que es devorado por el fuego. Tarantino con esta película ha roto los esquemas de la historia, inclusive ha roto con su acostumbrada brutalidad. Esta vez Tarantino ha sido menos violento, pero su humor negro sigue siendo el de siempre. Tarantino es un semidios metido a cineasta.


Abordaba la imagen del oficial nazi bebiendo leche mientras el campesino francés le cuenta que los judíos que busca se encuentran exactamente debajo de sus botas. Entonces son acribillados. De esa matanza, Shosanna Dreyfus (Melanie Laurent) logra escapar. Tiempo después ella misma planificaría la venganza quemando la sala de cine, de la que es propietaria, durante el avant premiere de una película nazi adonde ha concurrido la flor y nata del Tercer Reich, inclusive el führer.

Al evento también ha llegado el „Apache“, sobrenombre del teniente Aldo Reine (Brad Pitt) con sus „salvajes bastardos“ en una operación secreta que tiene como fin acabar con la vida de los cabecillas del nazismo. "Los Bastardos" es una guerrilla secreta integrada por judíos estadounidenses que tienen como objetivo asesinar nazis, y lo hacen con tal salvajismo, que provoca cerrar los ojos durante la función. Con esos métodos "los bastardos" se llegan a convertir en la bestia negra de los nazis, y su leyenda llega hasta los oídos de Hitler, irritándole sobremanera e hiriendo hasta su orgullo.


La película es rica en lenguajes: se escucha hablar español, italiano, inglés y sobre todo alemán y francés. Este es uno de aquellos largometrajes que te devuelve el gusto por el cine a pesar de su brutalidad y su irrespeto a la historia. No se olviden que, sobre todo, el cine es ficción, pero una buena ficción en el cine debe de ser creíble y, ante todo, bien hecha. Tarantino lo ha conseguido, a pesar que en la cinta, de más de dos horas, han quedado algunos cabos sueltos que no es el caso ahora revelarlos (1).

ANTICHRIST O ANTICINE


Un día antes, el sábado 19, vi „El anticristo“ de Lars von Trier. Una decepción. Un bodrio que me llenó de aburrimiento, excepto los 10 primeros minutos en donde he celebrado con alegría la existencia del cine por el cine: tomas secuenciales a cámara lenta, en blanco y negro, muestra a una pareja haciendo el amor en los servicios, mientras una máquina lavadora bate la ropa con fuerza mientras cuerpos y besos se entremezclan hasta el orgasmo; a unos metros, en su habitación, el hijo de los amantes toma la manija de la vetana que da a la calle, la abre, se yergue sobre la cornisa y cae lentamente sobre el asfalto cubierto de nieve. Allí se acabó la película, desde ese momento empezó un film aburrido lleno de sadismo. El esposo le hace la terapia a su mujer tras la muerte del vástago en una casita de campo. Aparecen sonidillos que no asustan ni a mi hijo de dos años y animalitos simbólicos tipo Disney. En el bosque ella trata de matar a su marido y finalmente la víctima se convierte en asesino. Una película de mal gusto y hasta vulgar, un mamarracho de menos de hora y media (109 minutos) que he tenido que soportar por respeto a mi acompañante (2).

VINOS ESPAÑOLES EN TOKIO

En Madrid, hace dos semanas vi „Mapa de sonidos de Tokio" dirigida por Isabel Coixet. Por esta directora catalana me saco el sombrero, pero la película –que dicho sea de paso posee una hermosa banda musical- tiene la sospecha de querer tratar a los espectadores como tontos, especialmente a los despiertos de cabo a rabo, porque hay quienes – como yo- que dicen que como el cine es ficción se puede aceptar historias banales que ni el mago Mandrake las aceptaría. Pero en fin, vuelvo a recalcar, el cine es ficción –no siempre, claro- pero que me cuenten historias que pueda creerlas ( sobre todo las que están excelentemente preparadas en laboratorio).

La historia de „Mapa de sonidos de Tokio“ trata de una chica japonesa que por el día trabaja trozando pescados y de vez en cuando es una sicaria. Para hacerla más corta: la asesina a sueldo se enamora de su siguiente víctima y muere como heroína por él porque el hombre que la ha contratado le pega unos tiros en su presencia (¿por incumplimiento de contrato?). Él, el salvado, es un español vendedor de vinos en Tokio, que tras perder a su novia que se ha suicidado -nada más y nada menos porque él no lo quería como ella le quería: así lo lee su padre en el espejo grabado con pintalabios al descubrir el cuerpo roto de su hija. Como venganza contrata a la sicaria para matarlo y como ya dije, ésta acaba enamorándose de su carne de cañón. La corto, porque el libreto es para reírse. Gracias a los dioses de Hiroschima o de Cataluña que la fotografía, la música, los actores, y los primeros minutos de „Mapa de sonidos de Tokio“ son loables, especialmente aquella parte en que el padre de la suicida recibe la triste noticia en medio de una cuchipanda de ejecutivos comiendo arroces, trocitos de pescado, y otras delicias de la gastronomía japonesa sobre los cuerpos desnudos de dos mujeres (3).

Espero que para la próxima la directora Coixet no nos trate como gusanos a sus admiradores.

Finalmente, de las dos docenas de películas que he visto en los dos últimos meses (incluyo la gaseosa "Abrazos rotos" de Almodovar -que la he visto en idioma alemán- y, excluyo al film austriaco "Der Knochenmann / El hombre de los huesos" de Josef Hader) mejor no hablo, porque, sencillamente, ahora sé porque la gente va poco al cine.

(1) Trailer de „Malditos bastardos“

http://www.youtube.com/watch?v=-F1ODQHgOqc

(2) Trailer del „Antichrist“

http://de.video.yahoo.com/watch/5825258/15238687

(3)Traile de „Mapa de sonidos de Tokio" http://www.youtube.com/watch?v=qoZvFsBZLuc

domingo, 20 de septiembre de 2009

RECONCILIACIÓN DE LITERATURA Y FÚTBOL (EN MADRID)

Portada del libro "Dios es redondo" del escritor mexicano Juan Villoro. Editorial Planeta.

El fútbol para mí es un recuerdo infantil diluyéndose como el agua entre los dedos. Es la imagen de un pimpollo que no quería ver la gran ciudad de Lima creciendo en el caos, y mi padre sigue siendo el espejismo que me lleva todos los días de la mano al estadio de fútbol de la capital de Perú: el Estadio Nacional (hoy ya existen otros más enormes).

El fútbol, como decía Borges, es una gran estupidez, una encerrona de 22 jugadores corriendo detrás de una pelota como unos huevones (léase, imbéciles); sin embargo el gran Albert Camus contaba que gracias al fútbol había aprendido todo lo que sabía, osea que, hipócrita lector, saca tus cuentas y de la chistera a "El mito de Sísifo" y "El extranjero" (no te olvides tampoco que Camus había sido en su adolescencia arquero y delantero del Racing Universitario de Argel). ¡Qué ofrenda literaria más hermosa cargada de tanta elegancia y amor por el balompié, maestro!. ¿Qué más habría escrito sobre fútbol si el escritor argentino Roberto Fontanarrosa hubiera sido inmortal?. Fontanarrosa no es Camus, pero ambos coinciden en algo, tenían una gran pasión por el balompié.

Este año he vuelto a reconciliarme con el fútbol, y he metido en la mochila el libro de Don Quijote de la Mancha, asistiendo con la emoción del primer niño para contemplar la algarabía de la masa alborotada un coliseo deportivo, en este caso, el Santiago Bernabeu, en el mismísimo centro del fútbol europeo de hogaño: Madrid (1).

Acomados en los asientos de norte desde donde se puede contemplar como se llenan poco a poco las tribunas del santiago Bernabeu. Foto: literatambo agosto 2009.

Hoy domingo 20 de setiembre de 2009 ha vuelto a ganar el Real Madrid, y ya es líder del campeonato liguero español, y como repito, si esta vez abordo como un pirata, sin espada ni pata de palo, al fútbol, es porque el deporte de los balones no está muy ligado a la literatura, y, por lo tanto, quiero reconciliarlos, a pesar de la existencia de un respetuoso número de amoríos literarios de escritores con el deporte de la pelota, entre ellos el que ya mencioné párrafos arriba, Roberto Fontanarrosa.

Siempre se nos ha hecho creer que el fútbol nunca ha sido intelectual. Y eso Fontanarrosa lo sabía, y quizá también Mario Benedetti, porque eso de "intelectualidad" suena sospechoso. Si no, que le pregunten a mi padre cuando compraba a plazos el libro "Tradiciones peruanas" de Ricardo Palma o "El mundo es ancho y ajeno" de Ciro Alegría y hablaba a la vez con tanta fantasía de un partido entre el Boca Juniors (2) contra los pincharatas de los Estudiantes de la Plata (3) o de los goles del Sport Boys del Callao (4) y de su querido Universitario de Deportes (5).

El fútbol también está cargado de tómbola literaria y nos dejó regados en el camino a escritores de aquí o acullá que destejieron su talento para rendir pleitesía a los goles. En Lima, han habido poetas que le han escrito loas a los goles del Alianza Lima (6), el equipo más popular de la capital de Perú (al lado del Universitario de Deportes, el queridísimo equipo de mi progenitor). El poeta peruano Juan Parra del Riego, en los años veinte, escribió "Polirritmo dinámico a Gradín, jugador de foot-ball”, del cual les apunto esto:

"La pelota hierve en ruido seco y sordo de metralla,
se revuelca una epilepsia de colores
y ya estás frente a la valla
con el pecho... el alma... el pie...
y es el tiro que en la tarde azul estalla
como un cálido balazo que se lleva la pelota hasta la red.
¡Palomares! ¡Palomares!
de los cálidos aplausos populares...

¡Gradín, trompo, émbolo, música, bisturí, tirabuzón!
(¡Yo vi tres mujeres de esas con caderas como altares
palpitar estremecidas de emoción!)
¡Gradín! róbale al relámpago de tu cuerpo incandescente
que hoy me ha roto en mil cometas de una loca elevación,
otra azul velocidad para mi frente
y otra mecha de colores que me vuele el corazón".

Juan Parra del Riego


La pelota está en movimiento y los hinchas vibran emocionados en cada jugada. Más es la espectación que el juego impecable. Las masas se ciegan cuando corre a prisa el tiempo y la adrenalia. Foto: literatambo agosto 2009.
Hay otros escritores como Horacio Quiroga que publicó en 1918 el cuento “Juan Polti, half-back” en la revista Atlántida, donde se lee con sobresalto el suicidio del jugador Abdón Porte, que jugaba en Nacional de Montevideo. Se comenta que uno de los mejores libros sobre fútbol es “El penal más largo del mundo”, del desaparecido Osvaldo Soriano. Muchos años antes, en 1951, el italiano Pier Paolo Pasolini escribió “Muchachos de la vida”, una pequeña historia que describe una partido de fútbol bajo un tórrido sol. Títulos hay muchos, pero entre los últimos se encuentra el libro "Dios es redondo”, del mexicano Juan Villoro, que se publicó en 2006.

Y como me fascina la plasticidad de la poesía les copio el poema "Los jugadores", del chileno Pablo Neruda:

Juegan, juegan.
Agachados, arrugados, decrépitos.

Este hombre torvo
junto a los mares de su patria, más lejana que el sol,
cantó bellas canciones.

Canción de la belleza de la tierra,
canción de la belleza de la Amada,
canción, canción
que no precisa fin.

Este otro de la mano en la frente,
pálido como la última hoja de un árbol,
debe tener hijas rubias
de carne apretada,
granada,
rosada.

Juegan, juegan.

Los miro entre la vaga bruma del gas y el humo.
Y mirando estos hombres sé que la vida es triste.

Pablo Neruda

El año pasado , como para recordar las salidas deportivas al estadio de José Díaz de Lima y ver jugar al Universitario de Deportes ("U") de la mano de mi padre, asistí a un partido del Cienciano del Cusco contra la "U". El taxista que me llevó al estadio me contó que el equipo cusqueño es tan famoso ahora que cuando la gente relaciona a un equipo de fútbol con el Perú, no lo hacen con los equipos de la capital de ese país andino, sino con el Cienciano del Cusco (7). Me contó también que esa vez que jugó el Cienciano contra el Boca Juniors (los del Cusco ganaron a los de Buenos Aires por tres a cero) la ciudad se llenó de argentinos e hizo muchos servicios de taxi llevando a hinchas llegados de la tierra de Borges. El fútbol también mueve pasiones y los bolsillos, sino que le pregunten a Leonel Messi, la estrella del FC Barcelona (8) que cobra anualmente 10 millones de euros. Si esto lo supiera el taxista cusqueño.

Arriba, el ambiente que se vive en las tribunas del estadio Garcilaso de la Vega del Cusco, Perú, es de los mejores. Abajo, parte del partido entre el Cienciano y el Universitario de Deportes de Lima que me tocó ver en la tierra de los incas. Foto: literatambo agosto 2008.


Como decía, hace dos semanas asistí al Santiago Bernabeu para ver al equipo que todos dicen en Europa que es el que está de moda, y, el más caro de la historia: el Real Madrid. El Madrid jugaba contra el Club Deportivo La Coruña (9), equipo del que me enamoré cuando llegué de marinero al puerto de A Coruña a bordo de una fragata peruana cuando tenía 17 años. Además, dicho sea de paso, la primera vez que vi un partido de fútbol en España fue efectivamente en La Coruña, en el estadio Riazor -cerquita a la playa del mismo nombre donde me he bañado infinidad de veces- esa vez fui acompañado de mi gran amigo gallego Manolo, que fue el primero que me envió de regalo por correo a Lima, los libros del cisne del padrón, la poeta Rosalía Castro.

Esta vez, en el Santiago Bernabeu la sensación ha sido muy distinta a los arroces con leche que mi padre me compraba antes de los partidos en Lima, o al pollo a la brasa que me comí junto a los míos antes de ver al Cienciano - "U" en el Cusco el año pasado, esta vez en Madrid, cerca de la Puerta del Sol, en el famoso Museo del Jamón, Dietrich, Mathias y yo compartimos unas cervezas heladas San Miguel antes del partido. Luego llegó el metro con sus ríos de gente bajando en la estación Santiago Bernabeu. Solo nos faltaba un billete, y lo conseguimos en taquilla, algo que nos pareció raro siendo la inauguración del campeonado de Primera División de España. Los alrededores del estadio era una fiesta y nunca he visto a tanta gente ataviada con la camiseta de un jugador: el número 9 de Ronaldo.
Vista del "Museo del jamón", local ubicado a pocos metros de la Puerta del Sol, en Madrid. Foto: literatambo agosto 2009.
Ingresamos a las tribunas luego de ver el control riguroso que se hace para acceder al estadio. Desde lo alto, en la zona norte del Bernabeu, pudimos ver como se llenaban poco a poco los graderíos del hermoso coliseo deportivo. Salieron los jugadores al gramado de juego. Calentaron músculos y doblaron piernas. Después salió, para dar el play de honor, el jamaicano Usain Bolt, el atleta más veloz del mundo, que días antes en Berlín había dejado a todos con la boca abierta al batir un nuevo record en los cien metros planos con 9.58 segundos. Entonces empezó la liga y el estadio del Real Madrid fue una verbena, con confites por aquí y por allá, con sonidos de trompetas y las letras del himno madrileño que siguen todavía horadando mis orejas, entonces llegó el gol de Ronaldo y la gente saltó de sus butacas y recordé las palabras de Jorge Luis Borges, diciendo que el fútbol es una estupidez, una gran estupidez de masas, y también me vino a la cabeza la sorna que imprime el título del libro de Villoro "Dios es redondo". Joder que es verdad, que sí, que con este fenómeno la globalización de la pelota está convirtiendo a casi a más de la mitad del planeta en víctimas de la dictadura del balón. El balón hipnotiza a los espectadores en los estadios y a los que están boquiabiertos delante de los televisores. Tanta razón tenías Jorge Luis.
El atleta más veloz del mundo, Usain Bolt, da el play de honor antes del partido Real Madrid - Deportivo La Coruña. Abajo las tribunas vibran, mejor dicho, la masa, en plena nirvana grupal. Fotos: literatambo agosto 2009.

¿Quién nos salvará del fútbol?. Yo no, por supuesto. Lo acepto tal como es, con su bemoles y sus reprimendas. Con sus contradicciones económicas que nos enseñan sus peores caras en tiempos de crisis en España: véase el caso de Messi del FC Barcelona que ya escribí arriba o el pago de los nuevos fichajes que ha hecho el Real Madrid en la presente temporada o el presupuesto récord para el próximo año del equipo merengue de 422 millones de euros sin contar con la deuda que acumula el club de Florentino Pérez de 457 millones.


Esto es el fútbol señores. Llena de anécdotas que nos hacen reír y llorar, como el de Jürgen Sparwasser metiendo el gol de la victoria por la ex DDR sobre la Alemania Federal en el Mundial de 1974, jugador que luego se escapara de la ex República Democrática Alemana, o, los goles de la selección argentina en el mundial de 1978 a pocos metros de los lugares donde eran torturados presos políticos durante el régime militar dirigido por Rafael Videla. O el Maracana en silencio cuando Brasil, en un día maldito para los cariocas y glorioso para los charruas, perdía la Copa Mundial de 1950 ante Uruguay, y, elevando la derrota a la categoría de duelo nacional y reportandose muchos suicidios. El fútbol es eso señores, lavatorio social y purgante de las masas. Entonces no me queda más que decir, parafraseando a Villoro, que el Dios es una pelota. ¡Que viva Dios, señores!.