DE PRONTO APARECIÓ TAMARINDO
durante mi periplo literario por el norte peruano llegué a esta localidad, Tamarindo, llena de sol, bonita, pequeña, acogedora, llana y pletórica de gente buena.
En este lugar he escrito muchos párrafos de historias que me provocaba el ambiente del norte peruano.
Además he visto una luna llena sui generis. Y he pasado, en sus locales gastronómicos, veladas de conversación sobre la vida y la literatura con el poeta Jose Díaz Sanchez Sánchez, extraordinario conversador y amigo. Y cambio de palabras con la maravillosa maestra y comunicadora Irayda Morán Ruiz.
Gracias, Tamarindo!
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