lunes, 25 de enero de 2010

LA POESÍA DE ERNST JANDL Y LA FILOSOFÍA ZEN

Arriba, portada de un libro de poesías de Ernst Jandl, y, abajo, el círculo Zen.


por Jose Carlos Contreras Azaña



Siempre me ha fascinado la filosofía Zen, pero, a pesar de idolatrarla, los recovecos del destino me han hecho pensar en el ayer o en el mañana y me han hecho que me descarrile completamente en la estación de la existencia que insiste que el pasado es un recuerdo y el futuro es una ilusión; lo que existe inexorablemente es el presente, el ahora en el que escribo la palabra ahora, ahora, y eso es lo que debemos disfrutar (o soportar); en eso pensaba mientras leía el poema „Vor Winterbeginn“ del poeta Ernst Jandl. „Vor“ tiene en español muchos significados; como por ejemplo: antes, previo, antes de, etc. y „Winnterbeginn“: inicio del invierno. Ahora que estamos en la última semana de enero en pleno invierno europeo (entonces es cuando pienso en los amigos de Lima que deben de estar lanzándose como patos sobre las aguas del Pacífico gozando del verano). ¡Ven! , otra vez he incurrido en el „unbeugsam“ (inexorable) pensamiento de pensar en otro tiempo y en otro espacio cometiendo con ello un flagrante atropello a las leyes de la filosofía Zen. Repito, en todo eso pensaba cuando leía el poema „Vor Winterbeginn“ del poeta nacido en Viena en 1925, Ernst Jandl.


„Die Rache der sprache ist das Gedicht“ (la venganza del idioma es la poesía) decía Jandl, y siempre me ha encantado ese juego de palabras que hacía él con el lenguaje alemán con un humor especial y sobre todo con una sonoridad que sería irrepetible en una traducción. Como ejemplo tenemos el poema ottos mopps (ottos mops trotzt / /otto: fort mops fort / ottos mops hopst fort / otto: soso /...). Pero en esta oportunidad quería referirme al poema vor winterbeginn que habla con un absoluta convicción circular del mundo y de las estaciones del tiempo (en el Zen la caligrafía Ensõ -traducido del japonés a Kreis en alemán o círculo en castellano- es un círculo oscuro que juega un papel preponderante en el Zen que simboliza el vacío). El yo poético se halla en el tiempo antes del inicio del invierno, y sin embargo siente ya los primeros embates del frío, „la primavera va a volver a venir“ dice en el primer verso a pesar que es otoño, „va a volver a venir la primavera“ repite en el segundo verso. Más abajo repetirá en cuatro versos el nombre de las cuatro estaciones, formando un círculo cerrado ( ¿un ensõ?) que no tiene principio ni final que me hace recordar a los poemas que he leído de los poetas de otras culturas y en especial de los vates mapuches, ancestral cultura afincada en el sur del sur de América.


Sin embargo ese movimiento circular que permite el paso de las estaciones es bloqueado por la existencia del final: la muerte. El poeta escribe desde el sexto verso „ quien muera antes / no tienen más que aferrarse / en ese eterno / primavera verano otoño e invierno“. La presencia de la muerte ingresa en medio y al final del poema. La muerte como cerradura del círculo, como el candado que impide girar la rueda del tiempo y del deseo. Quien muere pronto ya no desea y ya no tiene que añorar la llegada de la primavera. El círculo está cerrado: „el animal ha muerto .../ queda el hombre y su alma“ como decía Jorge Luis Borges en su poema El Elogio de la sombra.


Abajo les dejo el poema de Ernst Jandl. La traducción es de un servidor. Saquen sus propias conclusiones, que mientras se muevan las estaciones para nosotros, hay vida, a pesar que el círculo a veces se siga moviendo como la piedra en el mito de Sísifo.



VOR WINTERBEGINN


Ernst Jandl


der frühling wird schon wieder kommen
wird schon wieder kommen, der frühling
und wieder wird der frühling kommen
und der frühling wird wieder kommen
frühling wird kommen, wieder ...
wer früher stirbt
muss sich nicht mehr daran halten
an dieses ewige
frühling sommer herbst und winter
frühling sommer herbst und winter
frühling sommer herbst und winter
frühling sommer herbst und winter
frühling
wird kommen,
wieder...
wer aber früher stirbt
hält sich nicht mehr an dieses
ewige ewige ewige ewige ewige ......... ...
sondern sondern sondern sondern sondern ................



ANTES DEL INICIO DEL INVIERNO


Ernst Jandl


Traducción: Jose Carlos Contreras Azaña


la primavera va a volver a venir

va a volver a venir la primavera

y nuevamente la primavera va a venir

y la primavera va a volver a venir

la primavera vendrá, volverá ...

quien muera antes

no tiene más que aferrarse

en ese eterno

primavera verano otoño e invierno

primavera verano otoño e invierno

primavera verano otoño e invierno
primavera verano otoño e invierno

primavera

va a volver

nuevamente

pero quien muere antes
no tiene que aferrarse más en ese

eterno eterno eterno eterno eterno .............
sino sino sino sino sino .....................

miércoles, 20 de enero de 2010

DAS WEISSE BAND. LA CINTA BLANCA: GRAN CINE PARA CINÉFILOS

Arriba, afiche de la gran película „Das weisse Band“ del director austriaco Michael Haneke.

Hablar de cine en un portal literario me pone nervioso. Es que el director Michael Haneke es el culpable y me lo ha puesto difícil. Desde que vi su última película „La cinta blanca“ he discutido con muchas personas que la han visto. Yo la vi en diciembre y nunca antes una película me había hecho reflexionar tanto semanas después de haberla observado. Por favor, que no me vayan a malinterpretar. La cinta blanca es una película pesada, muy pesada, pero sin embargo un gran film, profundamente descarado en presentar sin moralismo la cara oscura de los seres humanos, de eso que hablaba Hobbes cuando decía „homo homini lupues“ (el hombre es un lobo para el hombre).


A principios de enero escuché a la escritora Clara Sánchez decir, cuando le dieron el premio Nadal por su novela "Lo que esconde tu nombre" ("Was dein Name verbirgt"), que escribiendo el referido libro había aprendido que a veces en la cara más amable se puede esconder el peor de los demonios (1). Entonces aparecieron nuevamente en mi escritorio las imágenes de „La cinta blanca“, ¿el opus magnum de Haneke?.


No quiero quitarles el tiempo en contarles de que se trata el film, porque esto lo pueden ver o leer más abajo (2), pero lo que si les quiero decir es que vayan a verla y sentaditos y tranquilos saboreen una obra maestra que el director Haneke te sirve sobre la mesa con tenedor y cuchillo conjuntamente con una serie de recetas del comportamiento humano sin que en ningún momento te de un sermón moralista. Eso sí, hay que estar muy bien concentrados, porque la película va lenta, a veces lentísima, (a parte que es en blanco y negro, a lo que muchos ya no están acostumbrados) pero contiene unas fotografías hermosísimas (no se pierdan las tomas de un árbol solitario en medio del lenguaje cinematográfico "hanekeano" y las primeras tomas a objetos simbólicos que caen como latigazos y no sabemos quien los ha provocado).


Las muchachitas y los muchachitos que trabajan de autores poseen una excelente calidad interpretativa, los cuales van saliendo como burbujas de la boca del profesor del pueblo cuando relata los acontecimientos que acaecieron en un pueblito protestante en Alemania antes de la primera guerra mundial. Acontecimientos como estos podrían haber ocurrido en cualquier lugar del mundo, porque no hay que olvidar la pregunta que hacía Erich Fromm en „El corazón del hombre“ ¿hay una minoría de lobos que viven entre una mayoría de corderos? O ¿al revés? ¿o todos somos lobos en potencia?.



(1) Premio Nadal 2010 geht an Clara Sanchez kurier.at


(2) http://www.youtube.com/watch?v=uYSOrNSdjs0


http://dasweisseband.x-verleih.de

Sitio web oficial

Filmheft der Bundeszentrale für politische Bildung mit Interpretationen und Hintergründen

domingo, 17 de enero de 2010

EL DIOS DE LOS ELFOS / DER ERLKÖNIG DE GOETHE

Arriba, portada del libro „Obras selectas“ de Johann Wolfgang von Goethe. Más abajo un trabajo pictórico de Edmund Brüning basado en el poema de Goethe „El Dios de los Elfos“. Fuente fotográfica (1)

Por Jose Carlos Contreras Azaña


Triste es cuando un hijo entierra a su padre, pero más triste es cuando un padre entierra a su hijo. Mis padres lo experimentaron en carne propia. En los brazos de mi madre murió una tarde de enero mi segundo hermano. Todas esas imágenes me han venido ahora en que todos apuntamos nuestros ojos taciturnos hacia Haiti. A veces me da miedo sentir esa emoción distante en los ojos de mucha gente que se sienta delante del televisor para ver tanta desgracia comiéndose una hamburguesa o un puré de patatas. Corremos el peligro inminente en caer en la marea de la banalización del horror mientras la información del lugar de la catástrofe fluye por el orbe. Loable es la ayuda humanitaria que llega de todas partes del mundo. Dentro de poco, cuando Haiti ya no sea más noticia, se habrán olvidado de ella. Todos nos habremos olvidado de ella. Espero que no sea así.


Antes del terremoto de Haiti andaba traduciendo uno de los poemas más hermosos que haya leído en mi vida: „Der Erlkönig“ de Johann Wolfgang von Goethe (lo he traducido para hacer feliz a una de mis alumnas, Frau Vogel, que es de Hamburgo y adora a Goethe y lo quería leer en castellano). Este poema habla de la muerte, de la muerte de un niño en los brazos de su padre quien cabalga a toda prisa para salvarlo cruzando el boque en la oscuridad. Leer el poema en alemán (en español se traduce como „El rey de los Elfos“) te pone la carne de gallina. Y sobre todo te invita a una infinidad de interpretaciones: un corcel que galopa llevando a su amo y éste en sus brazos a un pequeño moribundo. El escenario es oscuro, y en él podemos imaginar un bosque lleno de abetos o encinas.


Goethe lo escribió en 1782, siete años antes de la Revolución Francesa. A pesar de su ambigüedad es rico en imágenes, y por supuesto en interpretaciones: un padre cabalga y lleva en sus brazos a un niño. El niño tiene alucinaciones y cree ver entre las ramas del bosque al rey de los Elfos, pero el padre le indica que lo que ve solo es la neblina que se ha sentado sobre el bosque. El niño sigue observando otras cosas mientras agoniza. Ve a las hijas del rey de los Elfos, y otros detalles que va describiendo y que llegan a preocupar al padre por lo que éste se ve obligado a acelerar al caballo para acercarse al recinto donde presumiblemente será curado. Sin embargo el infante muere en sus brazos.


A pesar de la temática del poema el goce estético que regala es insuperable. Pocos poemas como este ( léase "Masa" de Vallejo, "Tierra baldía" de T. S. Eliot, "Tabaquería" de Pessoa o "La ciudad" de Kafavis, etc.) me han dejado tanta huella en mi pobre vida de lector, pero es que este poema de Goethe nos plantea una infinidad de enigmas y sobre todo mucho trabajo para desentrañar de él la madeja del misterio de su discurso poético. Cada lector tiene el derecho de interpretarlo a su manera. No se olviden que la poesía es la simbiosis de sonidos e imágenes en estructuras de palabras que liberan la imagianción y, por ende, al hombre.


Regresando al tema fundamental del poema „Der Erlkönig“: la muerte, se dice que el ser humano tiene varias muertes. Una de ellas es cuando el niño deja de ser niño. En ese sentido la mencionada transformación psíquica y biológica sería una de las interpretaciones que podemos hacer de „Der Erlkönig“, porque en sus versos se habla que un niño agoniza sobre los brazos del padre que cabalga, tiene alucinaciones y ve a las hijas del rey de los Adelfos. Exteriorizando con ello un mundo de ideas fantásticas y eróticas que le remiten a la llegada de la pubertad. El niño a muerto en el bosque mientras observa a las hijas del rey en un oscuro lugar (2).





DER ERLKÖNIG


Johann Wolfgang Goethe


Wer reitet so spät durch Nacht und Wind?
Es ist der Vater mit seinem Kind;
Er hat den Knaben wohl in dem Arm,
Er faßt ihn sicher, er hält ihn warm.

"Mein Sohn, was birgst du so bang dein Gesicht?"
"Siehst, Vater, du den Erlkönig nicht?
Den Erlenkönig mit Kron und Schweif?"
"Mein Sohn, es ist ein Nebelstreif."

"Du liebes Kind, komm, geh mit mir!
Gar schöne Spiele spiel' ich mit dir;
Manch' bunte Blumen sind an dem Strand,
Meine Mutter hat manch gülden Gewand."


"Mein Vater, mein Vater, und hörest du nicht,
Was Erlenkönig mir leise verspricht?"
"Sei ruhig, bleibe ruhig, mein Kind;
In dürren Blättern säuselt der Wind."

"Willst, feiner Knabe, du mit mir gehn?
Meine Töchter sollen dich warten schön;
Meine Töchter führen den nächtlichen Reihn,
Und wiegen und tanzen und singen dich ein."

"Mein Vater, mein Vater, und siehst du nicht dort
Erlkönigs Töchter am düstern Ort?"
"Mein Sohn, mein Sohn, ich seh es genau:
Es scheinen die alten Weiden so grau."

"Ich liebe dich, mich reizt deine schöne Gestalt;
Und bist du nicht willig, so brauch ich Gewalt."
"Mein Vater, mein Vater, jetzt faßt er mich an!
Erlkönig hat mir ein Leids getan!"

Dem Vater grauset's, er reitet geschwind,
Er hält in Armen das ächzende Kind,
Erreicht den Hof mit Müh' und Not;
In seinen Armen das Kind war tot.



EL REY DE LOS ELFOS



Johann Wolfgang Goethe

Traducción: Jose Carlos Contreras Azaña



¿Quién cabalga tan tarde a través de la noche y el viento ?
Es el padre con su primogénito;
Tiene al niño a buen recaudo en su brazo,

Lo lleva seguro, lo calienta en su regazo.

"Hijo mío ¿Por qué escondes temeroso tu rostro?"
"¿No ves padre al Rey de los Elfos ?
¿El Rey de los Elfos con corona y cola?"
"Hijo mío eso es una estría de niebla."

"¡Querido niño ven, vente conmigo!
He de jugar maravillosos juegos contigo,
Algunas policromas flores están a la orilla de la playa,
Mi madre posee algunos trajes dorados."

"Padre mío, padre mío ¿no escuchas
Lo que el Rey de los Elfos me promete murmurando?"
"Tranquilízate, permanece tranquilo hijo mío;
El viento columpia las hojas secas. "

"¿Quieres, fino pimpollo, venir conmigo?
Mis hijas te van a cuidar y mimar;
Mis hijas van a danzar en la noche,
Y te mecerán y te bailarán y cantarán."

"Padre mío, padre mío ¿no ves acaso allá
a las hijas del Rey de los Elfos en ese oscuro lugar?"
"Hijo mío, hijo mío, lo veo claramente:
Se ven aparecer los viejos y grises sauces."

"Te amo; me encanta tu hermosa figura;
Y si no me haces caso entonces usaré la fuerza."
"¡Padre mío, padre mío, ahora me toca!
¡El Rey de los Elfos me ha herido!"

El padre se aterroriza y cabalga deprisa,
Lleva al niño que gime en sus brazos,
Llega a la alquería con dificultad y apuro;
En sus brazos el niño estaba muerto.



(1) www.goethezeitportal.de

(2) http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=6967941556503127101

miércoles, 13 de enero de 2010

HERMANN HESSE Y EL INVIERNO

Portada del libro „Über das Glück“ de Hermann Hesse. Editorial Suhrkamp.

Cuando llega el invierno en Europa, lo que hago es abrigarme bien y releer a Hermann Hesse. Hesse sigue siendo para muchos más que un escritor o un poeta; es un acompañante, un amigo, una luz espiritual. En Alemania me he encontrado con gente que lee su literatura con devoción, sin embargo cuando se le dio el Premio Nobel, Hesse era un gran desconocido en su país, como lo fue hasta hace unos meses Herta Müller (gracias a la Academia se ha descubierto para el mundo tanto humanismo hecho palabra en esta mujer nacida en Rumanía).


„El lobo estepario“ fue el primer libro que leí de Hesse. Tenía doce años (Hesse lo escribió cuando cumplía los cincuenta), y seguro que en mis años mozos de Lima vivía el síndrome de la adolescencia, porque de otra manera no me explico como llegé a ese libro. Recuerdo haber leído absorto sus páginas con aquel personaje angustiado por su propio yo: Harry Haller


Ahora gozo leyendo al otro Hesse, el que podría emocionar a un lector local, nacido entre la nieve del invierno y la canícula del norte. Para leer a Hesse hay que leer con el corazón. Y sobre todo presentir su espacio, la Selva Negra, majestuoso paisaje que lo vio nacer, cuyos bosques puedo ver mientras escribo. Ahora gozo también leyendo a Hesse en su idioma, que no es mi idioma materno, pero ha pasado a ser como si lo fuera. Es un idioma fuerte pero hermoso cuando se lee a Hesse.


Ahora que ha llegado el frío del invierno, decía, los libros de Hesse son un buen refugio para olvidar el frío. Esta vez he vuelto al libro titulado „Über das Glück“, una recopilación de relatos, prosa poética y poesía que impregna a cada página ese amor a los campos y a los ríos. Hesse es un amante de la naturaleza, un romántico y un sentimental que hacía fluir por su piel las leyendas mitológicas de las selvas de su tierra. Dicen que sus pasiones eran caminar, contemplar cuadros y leer libros.


Esta vez, releyendo „Über das Glück“, me he encontrado con la prosa poética titulada Winterglanz. Contemplar la nieve todavía impregnada en los montes y los bosques cercanos de mi casa duplican la imagen que el mencionado relato aborda.


El relato describe que ha nevado cuatro noches y tres días sin pausa sobre un pueblecillo que está abigarrado de la amposidad del agua congelada. Las puertas de las casas y las entradas de los sótanos están ocultos para los que no la han limpiado con puntualidad la nieve. Muchos maldicen el frío y la nieve en el pueblo, sin embargo otros la glorifican, como nuestro personaje del relato que es feliz con la nieve.


Él, mientras vuelve al pueblo caminando sobre la nieve, describe la maravillosa naturaleza que se presenta delante de sus ojos: „Der Himmel stand rein und blau bis in unendliche Fernen offen...“ (1).


De pronto ve caminar delante algo pequeño. Se trata de un niño que va tarareando una melodia que él no logra reconocer pero que está seguro que la ha escuchado en alguna parte. Al final dice que en un día como ese se puede llegar a escuchar melodías y ver cosas que ya se ha escuchado y visto con frecuencia, pero que sin embargo nunca se han visto y nunca se han escuchado.


El texto, que fue escrito en 1905, es maravilloso. Atrevidamente poético. En todo eso he pensado mientras veía caer la nieve sobre Karlsruhe, hasta que las noticias desgarradoras tras el terremoto en Haiti me han despertado de mi sueño.


(1) „Über das Glück“. Hermann Hesse. Winterglanz, página 76.

martes, 5 de enero de 2010

EL LIBRO MÁS VENDIDO EN ALEMANIA EN 2009


El libro „Bis(s) zum Ende der Nacht“ de la escritora Stephenie Meyer, fue el libro más vendido en Alemania durante 2009 en la categoría de libros de ficción. „Glück kommt selten allein“ (Editorial Rowohlt) en la categoría de no ficción. Y el libro de bolsillo más vendido fue „Verblendung“ de Stieg Larsson.






A pocos días de haber abierto la primera página del calendario de la primera década del siglo XXI todos tenemos la curiosidad de saber cual fue el libro más vendido en Alemania en 2009. Estos son los resultados de acuerdo al informe de Buchreport que desde hace muchos años se encarga de los análisis de ventas de los libros en la tierra de Goethe, conjuntamnte con la revista Der Spiegel.

El libro „Bis(s) zum Ende der Nacht de Stephenie Meyer fue el libro más vendido del año 2009 en Alemania. El segundo „Bis(s) zum Abendbrot de la misma autora. Otro tercer libro de Meyer se encuentra en la lista de los diez libros más vendidos. En quinto puesto se encuentra „Atemschaukel“ de la premio Nobel de Literatura 2009 Herta Müller.


En la categoría no ficción el título Glück kommt selten allein (Editorial Rowohlt) de Eckart von Hirschhausen y Wer bin ich - und wann ja, wie viele? de Richard D. Precht: (Editorial Goldmann) ocupan el primer y el segundo puesto respectivamente.


En la categoría de libros de bolsillo „Verblendung“ del desaparecido escritor Stieg Larsson ocupa la primera posición de los más vendidos en 2009.


En la categoría ciencia ficción, estos son los diez libros más vendidos (1):


Puesto 1.- Stephenie Meyer: Bis(s) zum Ende der Nacht (Editorial Carlsen) CARLSEN Verlag - Startseite


Puesto 2.- Stephenie Meyer: Bis(s) zum Abendrot (Editorial Carlsen) CARLSEN Verlag - Startseite


Puesto 3.- Dan Brown: Das verlorene Symbol (Editorial Lübbe) Luebbe.de

Puesto 4.- Limit: Schätzing, Frank. Editorial Kiepenheuer & Witsch - Startseite


Puesto 5.- Herta Müller: Atemschaukel (Editorial Hanser) Carl Hanser Verlag - Homepage


Puesto 6.- Beckett, Simon:Leichenblässe. Editorial Wunderlich. Zu allen Neuerscheinungen bei Wunderlich


Puesto 7.- Heldt, Dora: Tante Inge haut ab. Editorial dtv online


Puesto 8.- Kuttner, Sarah: Mängelexemplar.Editorial S. Fischer Verlage


Puesto 9.- Stephenie Meyer: Bis(s) zur Mittagstunde CARLSEN Verlag - Startseite


Puesto 10.- Kehlmann, Daniel: Ruhm. Editorial Rowohlt Verlag - Bücher


Para seguir viendo la lista: Hardcover


En la categoría libros de no ficción, estos son los cinco títulos más vendidos en 2009 en Alemania:


Puesto 1.- Eckart von Hirschhausen: Glück kommt selten allein (Editorial Rowohlt) Rowohlt Verlag - Startseite


Puesto 2.- Richard D. Precht: Wer bin ich - und wann ja, wie viele? (Editorial Goldmann) GOLDMANN


Puesto 3.- Manfred Lütz: Irre – Wir behandeln die Falschen (Editorial Gütersloher Verlagshaus) Gütersloher Verlagshaus

Puesto 4.- Schmidt, Helmut: Außer Dienst. Editorial Siedler Verlag


Puesto 5.- Helmut Schmidt, Giovanni Di Lorenzo: Auf eine Zigarette mit Helmut Schmidt (Editorial Kiepenheuer & Witsch) Kiepenheuer & Witsch - Startseite


Para ver los títulos de la lista de los más vendidos en la categoría de libros de bolsillo según Buchreport, ver aquí: Taschenbuch


(1) http://www.buchreport.de/bestseller/jahresbestseller/hardcover.htm?tx_bestseller_pi1%5Bjahr%5D=2009

domingo, 3 de enero de 2010

LA IMPORTANCIA DE LLAMARSE ALBERT CAMUS: A 50 AÑOS DE SU MUERTE






Arriba, portada del libro „El Extranjero“ (Der Fremde) en una edición en idioma alemán publicada por la editorial Rowohlt. A la derecha una de las fotos más conocidas de Albert Camus hecha por el fotógrafo... la verdad que desconozco el nombre del autor de esta maravillosa fotografía.




„Mamá ha muerto hoy. O tal vez fue ayer, no lo sé. He recibido un telegrama desde el asilo: „Su madre ha fallecido. Entierro mañana. Sentidas condolencias“ Pero no quiere decir nada. Quizás haya sido ayer“.


El Extranjero. Albert Camus.


por Jose Carlos Contreras


Hace medio siglo, el 4 de enero de 1960, a la edad de 47 años, Albert Camus murió en un accidente automovilístico en el coche de su editor Michael Gallimard. El reloj que llevaba ese día se detuvo a las 13:55. Fue un final absurdo de una vida entregada a desenmascarar el absurdo antifaz que a veces lleva sin ser carnavales la existencia humana (el escritor no quería viajar en coche y tenía ya comprado un billete de tren para ese día). Camus es el más grande poeta del existencialismo, escribió obras de teatro, ensayos políticos y filosóficos, novelas, artículos y reportajes.


Después de la segunda gran guerra Albert Camus fascinó con sus escritos a las juventudes europeas, también a las alemanas, que culturalmente se hallaban en el suelo tras el conflicto de la cuarta década del siglo XX. Camus junto con Jean-Paul Sartre, Eugéne Ionesco (1) y Samuel Barclay Beckett (2) fueron la nueva savia que dio a Europa nuevos aires después de acabar destartalada y magullada por muchos costados.


Durante la ocupación francesa Camus escribía en el vocero clandestino de la resistencia. Se dice que Camus y el general De Gaulle, fueron quienes devolvieron a los franceses, después de la ocupación, el gusto a la vida y la fe en el hombre.


Eran tiempos de la guerra fría y los intelectuales en Europa limaban sus asperezas a través de discusiones de largo aliento. Mientras Sartre minimizaba los gulags, Camus combatía el totalitarismo rojo. Sin embargo el autor de „La peste“, no se dejaba amilanar por las posiciones antifascistas de los marxistas ni por las posiciones anticomunistas de los de la derecha. Después de los procesos de Nuremberg contra miembros del nacionalsocialismo Albert Camus solicitó la abolición de la pena de muerte a nivel mundial. En 1945 reaccionó horrorizado por la bomba de Hiroshima


En 1957 Camus recibió el Premio Nobel de Literatura, por lo que se levantaron voces en favor y en contra. Camus fue uno de los premiados más jóvenes en la historia de ese galardón.


El día de su muerte se halló entre sus pertenencias el manuscrito autobiográfico „El primer hombre“, que su hija por miedo a las reacciones rechazó su publicación durante 30 años, después, cuando se publicó por fin en 1994, sus admiradores pudimos leer, por ejemplo, lo que Camus escribió sobre su padre, a quien nunca conoció.


La imagen de Camus, cincuenta años después de su muerte sigue más firme como nunca. Sus obras como por ejemplo „El extranjero“ o „La peste“ ya forman parte de la historia inmortal de la literatura. Pero Camus fue más que su literatura, fue un intelectual de su tiempo sin temores ni tapujos, y que con la pluma y la palabra en ristre hincó (hinca) de rodillas a los que estaban (están) contra la libertad del individuo, la solidaridad entre los hombres y conoció muy de cerca el deshumanismo de las políticas de izquierdas y de derechas. Camus se ha convertido hoy por hoy en estímulo, guia y coraje para todos los seres humanos.


Para terminar estimado lector este recordatorio al gran escritor, les apunto una exquisita descripción que Camus escribió cuando estuvo en Montevideo, Uruguay (3).


"Me levanto temprano y escribo unas cartas. Luego, como sigo sin noticias de mis protectores naturales, voy a visitar Montevideo en un hermoso día gélido. La punta de la ciudad se baña en las aguas amarillas del río de la Plata. Aireada, regular, Montevideo se halla rodeada por un collar de playas y un bulevar marítimo que me parecen bellos. Hay una prestancia en esta ciudad, en la que parece ser más fácil vivir que en otras que vi hasta ahora. Mimosas en los barrios ajardinados, y palmeras que me recuerdan a Menton. Aliviado también por estar en un país de lengua española".



(1) La obra literaria de Eugén Ionesco dibuja la soledad de los humanos y lo insignificante que puede ser la existencia. Véase „La cantante calva“ o „El rinoceronte“ dos obras destacadas del catálogo del teatro del absurdo.


(2) Véase „Esperando a Godoy“, su obra de teatro más difundida.


(3) Véase „Camus en Montevideo“. Rubén Loza Aguerrebere. El País. Montevideo. 10 de diciembre de 2009.

viernes, 1 de enero de 2010

LIBROS DE LA PRIMERA DÉCADA DEL SIGLO XXI

Arriba, portada de „2666“ de Roberto Bolaño, que para muchos es uno de los mejores libros de la primera década del siglo XXI no sólo en idioma castellano. Lo escribió cuando veía que se acercaba la muerte. Su partida fue una gran pérdida, y tras él su leyenda se ha derramado como el aceite sobre el mar de la literatura. Abajo „Sale el espectro“ de Philip Roth, otro grande. Al lado, el fenómeno Harry Potter, de J.K. Rowling, que impresiona por muchas cosas.





„Lo que embellece al desierto es que en alguna parte esconde un pozo de agua“

"El Principito". Antoine de Saint Exupéry.



Por Jose Carlos Contreras

¡Vaya! ¡vaya! Quien lo hubiera pensado, estamos en la segunda década del siglo XXI. El tiempo corre a una velocidad de meteorito, mientras muchos avizoramos un futuro donde nos vemos delante del espejo pintando canas, otros apenas han salido del cascarón. Alguien dijo por allí que la vejez es una masacre. Bueno, en fin. Ha llegado el 2010. Y con ello la posibilidad de dar un paso al frente y confeccionar listas con los libros preferidos de la década que feneció.

Con el arribo de 2010 nos vienen un mogollón de pensamientos, porque.la primera década del siglo XXI fue una etapa colmada de cambios tecnológicos. Las transformaciones acaecidas en el campo de la comunicación a través de Internet como Facebook, Twitter, I-Pod, y celulares de tercera generación con acceso a la red, seguirán alterando o ¿enriqueciendo? la vida cotidiana de los habitantes del planeta: los teléfonos móviles nos han alargado las orejas, e internet nos ha extendido los ojos y las orejas también. Por el momento barrunto que los productores de libros digitales seguirán luchando a través de lobbys para imponerse en el mercado. Ni esto lo hubiera soñado Gutenberg o Julio Verne, ni Marconi ni Meucci, por lo tanto el primer año de la segunda década del Siglo XXI será el año cero del libro electrónico (a veces nos educan pensando que para llegar a la felicidad hay que acumular cosas).

En la pasada década muchas palabras nuevas se convirtieron en un referente cotidiano en la gente de habla castellana, especialmente las que suele usar la prensa, una de ellas es la palabra „talibán“: Vocablo que se publicará en la vigésima tercera edición del diccionario de la Real Academia de la Lengua en 2013. Otras palabras que podríamos unir a esta lista son digitalizar, correo electrónico, salvapantalla, entre otras, y quizá el verbo „googelear“, que viene de la palabra Google y, que ya lo he escuchado muchas veces.

La década pasada, además, fue testigo de los ataques de Al Qaeda contra Estados Unidos, un 11 de septiembre del 2001 (lo que ha acarreado hasta el momento muchos costos de vidas humanas y materiales en Afganistán e Irak) y que ha dejado un poco de lado el contexto semiótico que para muchos latinoamericanos significaba la fecha 11 de setiembre: el golpe de estado y la muerte de Allende en Chile. Empero 11 de setiembre sigue teniendo una estructura simbólica oscura y triste.

Por otro lado, China, Rusia, India, Brasil y otros países emergentes tomaron posiciones en el tablero de ajedrez internacional al lado de los que repartían decisiones en el mundo después de la caída del muro de Berlín. Barack Obama fue elegido presidente. En Latinoamérica gobernaron y gobiernan varias mujeres. Sin embargo en esa región sigue viviendo el 34% de la población bajo los niveles de pobreza y el 13,7% en la indigencia.

En 2002 se introdujo el Euro a los mercados. En 2004 hubo un tsunami que azotó las costas de Asia tras un terremoto de 8,9 grados de la escala de Richter. Otros tsunamis vinieron después cuando la economía mundial se sacudió con la crisis severa de las inmobiliarias, antes ocurrieron las del punto com. Al final de la primera década del siglo XXI el Estado y el mercado jugaron un tándem algo extraño en tiempos en que el capitalismo levanta sobre nuestras cabezas el semáforo del libre mercado. Alguien decía por allí que, tras la crisis de las inmobiliarias, las ganancias se privatizan y las pédidas se socializan. No se olviden que el miedo también es una estrategia.

La primera década del siglo XXI también fue testigo de los avances de la investigación del genoma humano y de las nuevas tendencias en las ideas sobre la familia, el matrimonio, los derechos de los homosexuales y el aborto. Además, con la condena del crítico Liu Xiaobos, nació el Mandela chino. Todos estos son temas que les ronda por la cabeza a los creadores de palabras, a los escritores de allá y acullá. Pero sobre todo creo que el cambio climático es uno de los temas que más les preocupan. Y le preocupa al mundo entero. Eso creo, a pesar que las cumbres no sirvan para mucho. En diciembre de 2009, en Copenaghe, sede de la última cumbre del clima se leyó un cartel tan provocador y tan lacerante que decía: „si el clima fuera un banco hace tiempo que lo habrían salvado“.

No hay que olvidar que en el mundo hay 900 millones de coches y que para producir un kilo de carne se necesitan 13.000 litros de agua. Desde la segunda mitad del siglo pasado el volumen de pesca se ha elevado de 18 a 100 millones de toneladas. Los expertos profetizan que en 2025 la escasez de agua podría afectar a 2 mil millones de personas. Paro aquí porque no soy el apóstol San Juan, y me remito a lo que decia Elías Canetti "¿regresará Dios cuando su creación esté destruida?".


Ahora vamos a lo que queríamos llegar, lanzar una lista de los libros que podrían ser los mejores de la década. Pero antes un par de conjeturas. Toda lista que se confecciona con el fin de denominar el mejor libro de un determinado tiempo o espacio puede ser absurdo y a veces paradójico, pero sobre todo, bajo su perfil arbitrario, se puede tornar confuso y ridículo, en el cual, sin embargo, se puede esconder alguna verdad, aunque la verdad total solo lo sabe Dios y los imbéciles.

Entre los libros que puedo denominar como los imprescindibles, y otros dirían los mejores de la década pasada, se encuentran „2666“ y „Los detectives salvajes“ de Roberto Bolaño (1) , „Tu rostro mañana“ de Javier Marías, „Rabos de lagartija“ de Juan Marsé, „Soldados de Salamina“ de Javier Cercas, „El mar“ de John Banville, „Sale el espectro“ de Philip Roth (2), „La carretera“ de Cormac McCarthy y „La maravillosa vida breve de Óscar Wao“ de Junot Díaz.

Despierta mi admiración el trabajo literario en esta década de Herta Müller (3) , Enrique Vila-Matas, Rafael Chirbes (3), Amos Oz, José Saramago, Haruki Murakami, John Updike, Juan Goytisolo, Jean-Marie Le Clézio, Joan Margarit, Cronwel Jara Jimenez, Manuel Rivas, Tobias Wolff, Carlos German Belli, J.M. Coetze, Paul Auster, Kazuo Ishiguro, Roberto Saviano, Leonardo Padura, Peter Handke, Ma Jian y el desaparecido Winfred Georg Maximilian Sebald.

Asimismo me despierta mucha curiosidad el fenómeno Harry Potter, de J.K. Rowling, a quien se agradece haber despertado en muchos infantes las ganas de devorar libros de más de 500 páginas, un buen comienzo para algún día saltar a obras de Cervantes o Dostoievsky. Despiertan también mi curiosidad otros fenómenos literarios como Paulo Coelho, Carlos Ruiz Zafón, Ken Follet, Dan Brown, Stephenie Meyer y Stieg Larsson (4).

Y finalmente un detalle importante: me llama mucho la atención la deuda que tiene todavía pendiente España con Don Manuel Azaña, genio y portento de la palabra.

(1) Roberto Bolaño murió en el 2003, cuanto tenía cincuenta años.

(2) Roth ha sido propuesto tantas veces para el Nobel de Literatura. Y hasta ahora nada de nada.


(3) Leer a Herta Müller en alemán es una delicia. Su prosa está cargada de una intensidad poética que asusta.


(4) Atención con este escritor español. Mucho ojo, mucho ojito que Chirbes es filigrana pura.

(5) Igualmente atención con este autor, que murió en 2004 cuando tenía cincuenta años , y tiene una biografía "políticamente no incorrecta".